Traumatismos de la mano

Dentro del mundo del deporte, las manos suelen estar expuestas a posibles traumatismos. En el caso de los porteros de fútbol sala o baloncesto es muy evidente, por ello ya hablamos en otro artículo sobre el vendaje de dedos y muñecas. No obstante, cualquier jugador no está exento, ya que en cualquier caída o traumatismo al golpearse contra otro jugador es posible que los dedos y manos se lleven el impacto.

Es por ello que este artículo lo voy a dedicar al tratamiento de fisioterapia que hay que seguir en estos casos, teniendo en cuenta que puede ser un simple traumatismo, o acarrear otros daños como esguinces, luxaciones, fracturas, etc.

Tratamiento de los traumatismos de la mano

Para empezar, el tratamiento debe ser lo más precoz posible, y dependerá de la importancia y de la asociación de lesiones de huesos y articulaciones, con las de las partes blandas, como pueden ser los ligamentos o tendones.traumatismos de la mano

Lo más importante es la lucha contra el edema y las adherencias cicatriciales en caso de que las haya, además de mantener una buena movilidad de todas las articulaciones si alguna se ha visto comprometida.

Lo primero que haremos será inmovilizar la mano durante 48 horas para darle un estricto reposo, aplicando hielo 4 veces al día durante 10-20 minutos, compresión mediante un apósito grueso y mantener la mano más elevada que el hombro en la medida de lo posible, por ejemplo, mientras estamos en casa.

Mientras tanto iremos haciendo ejercicios activos de las articulaciones que han quedado libres (dedos , muñeca, codo, hombro) en posición declive.

Pasado el periodo de inmovilización, empezaremos con el tratamiento de fisioterapia como tal, aplicando calor en forma de fango, parafina o baños con agua caliente y sal, para que den un efecto sedante, y aplicaremos después hielo si hay edema localizado. También podemos hacer baños de contraste, poniendo en una palangana agua caliente y en otra agua fría con hielos, e ir alternando, aguantando 1-2 minutos con la mano en cada una, y mientras tenemos la mano sumergida, ir haciendo movilizaciones.

Empezaremos a dar también masajes circulatorios del antebrazo y la mano, podemos poner electroterapia (corrientes), ultrasonidos, electroacupuntura, etc. Y si hay edema, podemos hacer drenaje linfático manual o presoterapia.

Empezaremos a hacer ejercicios de movilización y fortalecimiento de manera gradual, primero global y poco a poco más analítico, llegando siempre hasta el punto previo al dolor, para no dar lugar a que se irrite. Si después de estas sesiones hay reacción inflamatoria, aplicar hielo al acabar.

Una vez que veamos que estamos recuperados, es recomendable usar alguna muñequera, férula o vendaje a la vuelta al deporte, para evitar sufrir otro traumatismo y volver al principio. En especial los porteros, que saben que van a llevarse algún que otro balonazo en las manos, deben estar totalmente recuperados y prevenir futuras lesiones con algún tipo de protección.

Si necesitas tratamientos o algún vendaje, en nuestro centro de fisioterapia en Zaragoza podemos ayudarte.

Otros artículos relacionados:

Vendaje de dedos y muñecas

Tendinitis del manguito rotador

Luxación de hombro

Aplicaciones del hielo

Drenaje linfático manual

Presoterapia